Visitas


viernes, 6 de enero de 2017

PARA TI, D.SANTOS LORENTE CASAÑEZ




Son muchas las veces que deteniéndome durante la veloz vorágine de los tiempos en los que se desarrolla mi existencia  y aprendiendo lo que Dios ha tenido a bien dictarle a mi corazón, cumplo lo que el mismo Dios me exige: ¡Sal de tu tierra!¡Sí!  Sal de esa vorágine de acontecimientos medidos equivocadamente con el reloj material y, entrando en la armonía en la que yo te dibujé, mira y agradece.
Él, Dios,  ha querido que no sólo de pensamiento o de corazón ni tampoco sólo oralmente sino que por escrito, para que quede constancia, agradezca a todos los que se han dejado utilizar por Él, para enseñarnos, en este caso enseñarme, cosas bellas y buenas.

Por eso hoy este escrito está dedicado a D.SANTOS LORENTE CASAÑEZ.   GRACIAS D. SANTOS.

Echando la mirada atrás y llegando a aquella época en la que llegaste a mi pueblo, Quesada, contando yo con 12 años de edad,  surge de mi interior un colosal agradecimiento a DIOS por haber tenido ese detalle de amor para conmigo perfilando en mi paisaje vital figuras como la tuya. SÍ, la persona de D.Santos Lorente Casañez.
Te debo mucho agradecimiento D.Santos porque, teniendo yo desde muy pequeñita al SEÑOR en mi vida cotidiana, tú me lo presentaste de tal forma y con tanto amor que en muy poco tiempo me sentí realmente enamorada de Él. JESÚS DE NAZARET.

Él fue mi primer amor y yo le conocí a Él porque tú, D.Santos, me lo presentaste. Me lo diste cotidiano, cercano, capaz de enamorar a toda gente especialmente a gentecilla como yo.  Y yo me enamoré, caí rendida a los pies de ese Dios-Hombre llamado Jesús de Nazaret. Esto me generó cierto “problemilla” en los amores pre y adolescentes en el plano material porque si alguna vez me sentía atraída por algún chico de mi entorno inmediatamente lo comparaba con el Señor Jesús y de una forma muy rápida se desmoronaba la atracción por esa persona. Pero yo seguía feliz.
Recuerdo también con que esmero procedías con nosotros y cuánta energía gastabas para llevarnos a todos a Jesús. Tú no querías formar tu grupo particular. Tú querías formar un grupo para Dios y para Dios surgieron de ese grupo vocaciones sacerdotales. Recuerdo a Pablo que es sacerdote en la comunidad de Madrid. Aquel tiempo fue tan importante, se elevó tanto mi nivel del ser con tu acompañamiento, dirección y consejo que no sé que hubiera sido de mí si en esa época no hubieras estado activamente dentro de mi paisaje vital. GRACIAS DIOS. Gracias D.Santos.
Recuerdo los trabajos que hacíamos en clase, los  fuegos de campamento con el pueblo, los concursos de villancicos, recuerdo los ensayos con el coro


y el esmero con que preparábamos el TRIDUO PASCUAL, la NAVIDAD, PENTECOSTÉS que son los grandes acontecimientos de nuestro calendario litúrgico cristiano. Recuerdo como con denodado entusiasmo alimentabas nuestro ser espiritual con EVANGELIO.
Recuerdo como, con una elegancia propia solamente de un auténtico cristiano, te detenías más con aquellos compañeros que parecían estar más reacios a acoger al SEÑOR como líder de vida. Fueron muchos años en los que DIOS, como sólo ÉL sabe hacer utilizando el momento oportuno, quiso que tú estuvieras en nuestras vidas, que estuvieras en la mía y ya cuando mi interior se transformó en un volcán de Dios, buena parte del trabajo estaba ya realizado. Ya sabemos lo que ocurre con los volcanes aunque dejen de erupcionar durante miles de años no están apagados, más bien, se están cargando de energía para, llegado el momento oportuno por Dios estipulado, salir a la superficie.
Ahora sé que estás muy enfermo, me dicen que estás en el hospital y aunque la oración es un idioma muy eficaz para los cristianos, quiero, como si de una oración se tratara, compartir esta experiencia con todos, desde la azotea de estos tiempos que es internet. Si todos queremos podríamos hacer de Internet UN PENTECOSTÉS en lugar de una TORRE DE BABEL a la que muchos la están involucionando.
A mi conspicuo profesor de religión, al sacerdote que me condujo hacia un camino llamado CRISTO,

GRACIAS DIOS. Gracias D.Santos. Nada ni nadie nos separará del AMOR DE DIOS.


Purificación García.

No hay comentarios:

Publicar un comentario