EL CRISTO ERRADICA LA HIPOCRESÍA

Aprendí de pequeña en la escuela que era de ignorantes el juzgar el todo por la parte o viceversa. Aprendí en la Iglesia las palabras de Cristo: no juzguéis y no seréis juzgados, nos dice su evangelio.

Qué sociedad tan hipócrita ésta en la que vivimos. Qué sociedad tan hipócrita ésta con la que contribuimos para que continúe siéndolo.

Un sacerdote en su homilía explica que, si de nuestra sociedad se extirpan los valores cristianos, ésta se convierte en una jungla. Yo digo: así es.

Alguien extrae sólo un momento de la homilía que, estando fuera del contexto al que pertenece, pierde totalmente su valor. Después  lo pone en la red y se monta una situación que ni el propio Kafka la hubiera podido superar.

Qué enorme hipocresía, que sociedad tan manejable, que ignorancia tan atrevida.
Yo preguntaría a todos los que se han atrevido a opinar sobre el tema que si han escuchado el todo y no sólo la parte que anda por internet. Que síii, que los cristianos y los que no quieren serlo sabemos que si se erradica de la cultura los valores del  CRISTO la sociedad se convierte en jungla y desaparece.

¿No será que a algunos oídos se les petrifica el tímpano con sólo oír el nombre de CRISTO o JESÚS  como mejor lo conocen los niños?

¿No es cierto que una sociedad como la nuestra en la cual cada día se le pone velas a la cultura le da grima reconocer el fracaso al que estamos llegando?

Todos los días vemos en los medios de comunicación o en la propia experiencia: violencia, muertes, robos, engaños, mentiras que arruinan la vida de los otros. Si la cultura es la cura de todos esos males y la sociedad actual es la más culta de todos los tiempos ¿qué es lo que está fallando? ¿por qué entonces hay tanta violencia en las palabras y en los gestos de tantas gentes? Ni siquiera en los debates televisivos se saben respetar.

Entonces  si yo vinculo la premisa o proposición:

La cultura es la solución a la violencia e injusticia de nuestra sociedad.

Con la premisa o proposición:

Nuestra sociedad es la más culta de todos los tiempos.

La conclusión del argumento debería ser:

Nuestra sociedad está libre de violencia y de injusticia.

Pero vemos que eso no es verdad, que no se cumple. Hemos de reconocer, entonces, que lo que muchos quieren bendecir falla estrepitosamente.

Y mientras todo esto pasa los niños siguen siendo asesinados, siguen siendo abortados, pero según muchos como eso es un derecho pues que mueran. ¡Ay cuán hipócrita es esta sociedad!

Las fuerzas que quieren erradicar los valores cristianos no soportan ver una cruz, ni al Cristo clavado en ella ni mucho menos al Resucitado de entre los muertos ni a María la Madre. Por eso proponen quitar las imágenes de todos sitios, incluso los templos dedicados desde siempre, porque esa es su esencia,  a la celebración de la OBRA DE AMOR MÁS GRANDE JAMÁS CONOCIDA, quieren dedicarlos a conciertos y teatros cofradieros. ¿Lo están consiguiendo? Pues sí.  ¿Cómo? Pues declarando los grandes templos patrimonio de la humanidad con lo cual se consiguen recursos económicos para su mantenimiento y esa, a mi modo de ver, es la clave. Si se aceptan recursos económicos ya se está a merced de aquel que los aporta.

La Semana Santa de muchos lugares ha sido titulada de interés turístico nacional o internacional y ¿qué se consigue con esto? Económicamente no lo sé pero lo que sí sé es que el cristiano que quiera vivir la Semana Santa de forma auténtica y original tiene que irse de esos lugares.

Si quisiéramos aceptar en nuestras vidas, de forma auténtica y sincera, a Cristo y su enseñanza no tendríamos que invertir tiempo ni energía en erradicar la injusticia, desaparecería la violencia y, muriendo éstas, todos sus apellidos también morirían. Si se apaga la violencia dejará de existir la violencia de género. Si se muere la injusticia desaparecerá con ella la injusticia social y la económica.

En fin todo es cuestión de que cada cual piense por sí mismo y no obedezca al dictador intelectual de cada momento histórico o social. Porque los dictadores te dicen lo que tienes que pensar. Los sabios te piden que aprendas a pensar.

CRISTO TE OFRECE LA LIBERTAD. ¿la quieres?  ¿sí?


                                        ELEVA, PUES, EL NIVEL DEL SER.