¿QUIÉN ES HOY HERODES? ¿Y RAQUEL?¿ CUAL ES LA RAMÁ DE HOY?

¿QUIÉN ES HOY HERODES?¿Y RAQUEL?¿DÓNDE ESTÁ HOY RAMÁ?

Hoy hace un año de tu partida de entre nosotros D. Santiago García Aracil. Elevo oración a Dios con la esperanza de que sea escuchada. Pongo la oración en las manos de María, nuestra madre, ella sabe a dónde y cuándo dirigirla para el mayor bien de tu alma.

Que aprisa pasa el tiempo, que rápido galopan los días, los meses, los años; sin embargo las situaciones de injusticia parecen haberse detenido como roca clavada al suelo y, al quedarse estáticas, no pueden caminar para alcanzar la Justicia, el Amor y la Paz.

Hoy Ramá remueve sus entrañas por el grito de dolor de Raquel que no quiere ser consolada porque sus hijos ya no están, nos canta el profeta Jeremías.

Pero ¿Quién es hoy Ramá? ¿Quién es hoy Herodes? ¿Cuántas “RAQUEL” hay hoy gritando de dolor día y noche?

Hoy Ramá es casi todo el planeta, especialmente los países del mal llamado “primer mundo” porque en toda esta basta extensión se producen diariamente asesinatos de inocentes.

¿Inocentes? ¡Sí! Inocentes. Niños que no nacerán porque Herodes no lo permite y se está ocupando del exterminio de la ESPERANZA que cada niño trae consigo al nacer porque Dios la puso allí.

Pero yo te digo a tí HERODES, que millones de inocentes morirán por tu maldad pero te serán pedidas cuentas tan hondas, tan exigentes, tan ímprobas que sentirás  el dolor en ti mismo hasta evaluar en tus propias carnes el dolor que tú engendraste en la RAMÁ del siglo XXI.

¿Quién es Herodes Hoy? Hoy Herodes es un latido de maldad instalado en un sistema que aplasta y oprime al débil. Hoy Herodes  es ese malévolo conjunto de gobiernos que desarrollan su dolorosa acción en los países equivocadamente llamados desarrollados. Hoy herodes es todo ese cúmulo de asociaciones que, cual sanguijuelas, han llamado derecho al hecho de matar inocentes. Asociaciones que vestidas de libertad con alas de hierro, quieren engañar a la sociedad haciéndose pasar por defensoras de las madres matando a sus hijos, aunque ya sabemos que con este cruel hecho están haciendo desaparecer el ancestral sentido de la palabra MADRE.

Está claro que HERODES AÚN NO HA MUERTO. Pero ¿Quién lo mantiene vivo?: Todo aquel que mira para otro lado ante situaciones de injusticia. Todo aquel que sigue permitiendo que campee a sus anchas a cambio de estabilidad en el propio bolsillo. Llegará el momento, quizá muy pronto, en el que nuestro abultado bolsillo no pueda pagar ni siquiera el remedio de un solo gemido de dolor de nuestro propio sufrimiento.

¿Y Raquel?, hay muchas también en esta época. Son muchas las personas que enferman, que no pueden dormir porque con sus impuestos el gran INCUBO llamado HERODES hace matar a los no nacidos en el vientre de la madre y sufren tanto... tanto que, mirando al Cielo, piden con urgente ardor: Señor, aparta de nosotros esta abominación, que pase pronto el cáliz de esta edad de hierro porque la injusticia, el odio, el horror y la usura son libaciones que ya  están haciendo rebosar ese cáliz. Señor las RAQUEL de nuestro tiempo te pedimos ayuda, compasión. Te imploramos que venga ya a nosotros tu Reino.

Hay mucha oración nacida del corazón de todas las RAQUEL de esta era, que sufren porque escuchan el llanto del niño troceado o abrasado en el claustro materno.

Yo me sumo a esta oración, pidiendo que el ENMANUEL cambie el corazón petrificado del ser humano de esta era, ese corazón que en su ritmo no hay sístole ni diástole sino asesinato y odio.

Pido un deseo, ahora que estamos en TIEMPO DE NAVIDAD que, durante sólo un segundo, todos podamos sentir el llanto del niño no nacido al ser asesinado en el vientre de su madre, el llanto de dolor del niño ya nacido cuando el hambre le ataca o cuando los adultos profanan su cuerpo, el llanto del esclavo que pide ser libre para escapar del látigo envenenado del opresor.

Pido que podamos, sólo por un segundo, sentir el llanto de los árboles víctimas de las llamas o de la tala indiscriminada provocadas por el egoísmo humano. Pido, sólo por un segundo, escuchar el llanto de los peces al verse enredados en los plásticos que los ciudadanos de todos los países arrojamos a mares y océanos y que les roba el oxígeno impidiéndoles respirar.
Pero pido sobre todo que estos llantos y alaridos que este grito de dolor de la naturaleza entera llegue al conducto auditivo y desde allí a cada célula del organismo del HERODES DE, ÉSTE, NUESTRO TIEMPO y que allí se quede bastante más de un segundo.

Purificación García.